Nuevas Formas de Cognición

Nuevas Formas de Cognición

Reflexión sobre las nuevas formas de cognición emergentes y sobre la influencia de las Tecnologías de la Información y la Comunicación en los procesos cognitivos.

“Pensamos en, con, junto, contra el colectivo con el cual convivimos.
Es el colectivo el que nos permite pensar y legitimar el conocimiento.
Un colectivo que no incluye sólo a seres humanos, sino también
tecnologías, espacios activos, que le dan forma,
lo conforman y lo transforman.”
(Denis Najmanovich)


La cognición distribuida

Muchos investigadores entre los que se destacan G. Salomon, D. Perkins y T. Globerson (1992) han estudiado sobre cuáles son los efectos del uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación y de qué manera influyen esas tecnologías en los procesos cognitivos, entendiendo por ello los modos en que conocemos y pensamos el mundo. Estos autores, han encontrado dos tipos de efectos de las tecnologías en la cognición: los que se obtienen en conjunción con la tecnología en el transcurso de la interacción, y los procedentes de la tecnología.

La primera de esas formas se relaciona con el rendimiento que se alcanza en el curso de su actividad siendo asistido por un programa o una computadora. Es obvio que el hecho de operar con una máquina influye en la actividad y en la calidad de los trabajos realizados. Tal influencia es denominada por estos autores como efectos con la tecnología, los cuales pueden redefinir y mejorar el rendimiento cuando se trabaja en colaboración con las tecnologías. Éstas asumen una parte importante del proceso cognitivo y sus efectos remiten fuertemente al concepto de colaboración intelectual.

Otro efecto en el desarrollo cognitivo se produce en la medida en que se producen cambios en los procesos comprensivos a partir del uso de la tecnología. Los efectos de la tecnología en este caso producen una transformación relativamente duradera en las capacidades cognitivas. Dichos efectos son los que resultan como producto de la relación de las personas con diversas tecnologías y que se pueden transferir a distintos contextos y nuevas situaciones. A esta consecuencia del trabajo con tecnologías inteligentes lo denominan residuo cognitivo y se refieren a aquello que perdura tras la experiencia con la tecnología, la cual dota a las personas de habilidades y de estrategias del pensamiento. Estos efectos tienen distintos niveles de profundidad y no implican necesariamente una exposición directa constante a las tecnologías. El segundo efecto de la tecnología es explicado por Perkins tomando como punto de partida la noción de inteligencia distribuida formulada por Roy Pea, quien concibe la cognición humana como distribuida más allá del ámbito del organismo propio. Una cognición que abarca otras personas, y se apoya en medios simbólicos, el entorno físico y social inmediato que participa en la cognición, no sólo como fuente de información, sino como vehículo de pensamiento.

La “persona-más”

Perkins recurre al concepto de “la persona-más” para hablar de pensamiento y aprendizaje. La “persona-más” es para él la persona más el entono, comprendido como un sistema, el cual incluye el entorno físico, social y simbólico. El pensamiento es parte de lo que se hace en ese entorno, y el aprendizaje son los rastros que quedan en la persona. La persona es concebida como parte de una red en tanto es pensada como la intersección del conjunto de persona-más en el cual participa el individuo. Afirma Perkins que tal vez sea mejor concebir a la persona no como el núcleo común sino como el conjunto de interacciones y de relaciones de dependencia; como la unión de compromisos o como la suma de multitud de participaciones.

La idea de cognición distribuida señalaría la influencia modificadora que la persona ejerce en el entorno social y subrayaría además, la importancia del entorno físico al lado del social como principal factor en el conocimiento del sistema de la persona-más. Obviamente, esta perspectiva sostiene que los parámetros y trayectorias básicas del desarrollo y la cognición humana pueden cambiar según los matices del entorno y de la relación de la persona con él.

Sería posible entonces imaginar un proceso educativo que se oriente en mayor grado hacia la persona-más, fortaleciendo experiencias que acumulen mayor saber y arte en relación con los recursos cognitivos suministrados por los medios físicos y humanos que los rodean.

 

Publicado el:

sábado 26 de noviembre de 2011

Autor:

  • Patricia Cabrera

Nivel:

  • Primario
  • Secundario

Área Curricular

  • Lengua y Literatura

Temática

  • TIC

Tipo de Recurso

  • Artículo