Ideas para planificar nuestras clases con TIC

Ideas para planificar nuestras clases con TIC

Próximos a comenzar el ciclo lectivo, los docentes nos vemos interpelados a revisar nuestras planificaciones; más aún, si últimamente la escuela ha recibido algún tipo de equipamiento tecnológico. ¿Cómo integrar las TIC a nuestras propuestas de trabajo en el aula? ¿De qué manera éstas pueden promover mejores prácticas de enseñanza?

El camino de la integración de las TIC en el aula

En los últimos años, se han llevado adelante -tanto a nivel nacional como provincial-, políticas educativas que impulsan la inclusión de las TIC en el sistema educativo: distribución de equipamiento tecnológico, capacitación docente, producción de contenidos educativos digitales, entre otras acciones. Sin embargo, este proceso no es lineal, sino que va adquiriendo formas y prácticas diversas en las aulas.

Jordi Adell plantea que, más allá de las diferencias de escenario, los procesos de inclusión de TIC en la escuela suelen seguir un camino más o menos similar que comienza con el acceso, pasa por un momento de adopción que implica implementar las mismas prácticas educativas pero con TIC, la adaptación dónde se avanza en productividad, la apropiación cuando comienzan a introducirse modificaciones en la didáctica y aparecen nuevas formas de enseñar que no serían posibles sin la tecnología; hasta llegar a la innovación en la que las prácticas escolares sufren transformaciones radicales. Es deseable que, poco a poco, vayamos apropiándonos de las diferentes tecnologías que tenemos disponibles en la escuela de manera que éstas afecten nuestros modos de enseñar y redunden en una mejora de los aprendizajes de nuestros alumnos.

En este camino, uno de los de los inconvenientes que suelen presentarse a la hora de planificar nuestras clases con TIC es que pretendemos diseñarlas a partir de una herramienta tecnológica que nos ha parecido interesante y perdemos de vista el contenido, relegándolo a un segundo plano. Investigando estas prácticas en la búsqueda de alternativas que orienten a los docentes a la hora de planificar sus clases con TIC, los especialistas Punya Mishra y Matthew Koehler, así como también Judi Harris, han diseñado lo que se conoce como el “Modelo Tpack” </b (sigla en inglés de Technological Pedagogical Content Knowledge); que se ha convertido en un marco conceptual para analizar estos temas.

¿Qué es el Tpack?

En este video, Judi Harris se presenta y nos explica en líneas generales en qué consiste el Tpack.

La idea de base es que educar con tecnologías es un problema complejo que requiere soluciones creativas, que son los docentes quienes deben buscar dichas soluciones y que, para ello, deben poner en juego diferentes saberes: pedagógicos, disciplinares y tecnológicos, que en su integración conforman 7 áreas de conocimiento, tal como puede apreciarse en la siguiente imagen.

El modelo plantea un tipo de planificación basado en actividades, que pone el acento en la centralidad del alumno (que aprende porque realiza dichas actividades cargadas de significación) y en el curriculum, que aporta contenido. Al mismo tiempo, la tecnología se pone en juego, no como un recurso más, sino como una herramienta que media para que el alumno construya saberes que no alcanzaría sin esa mediación.

Es importante también que no perdamos de vista que los tres tipos de conocimiento (disciplinar, tecnológico y pedagógico) se construyen en contexto. Cada docente tiene una trayectoria de formación, un recorrido por las escuelas, ideas y creencias que van configurando un modo de entender la clase que, además, también se da en un contexto institucional particular.

En ese sentido, podemos advertir que, si bien es posible proponer ejemplos de actividades, éstas no son “aplicables” sin adecuación a cualquier escenario educativo. Por otra parte, tener presente esta contextualización del conocimiento nos permite considerar también la dimensión política e ideológica que es intrínseca a todo proceso educativo.

Diseñando actividades a partir del Tpack

Les proponemos otro video, en el que Jordi Adell desarrolla algunas ideas acerca de cómo podemos planificar nuestras actividades.

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Adell caracetriza la planificación docente como una tarea:

– Situada, pensada para unos alumnos particulares
– Contextualizada, para una institución educativa concreta
– Basada en actividades, las actividades son las unidades básicas de la planificación, la forma en la que éstas se secuencian va dando sentido a la planificación.
– Rutinizada, tiene que ver con el desarrollo del conocimiento experto, la cotidianidad de la tarea impide objetivar la misma para poder describirla y analizarla

Planificar implica tomar una serie de decisiones que, según nuestro marco teórico de referencia, se dan en el siguiente orden:

1. Decisiones curriculares: ¿Cuál/les contenidos vamos a enseñar? ¿Cuál/es son van a ser nuestros objetivos respecto a los mismos?

2. Decisiones padagógicas: ¿qué actividades vamos a proponer? ¿qué esperamos obtener de dichas actividades? ¿Cómo las vamos a evaluar? ¿Con qué criterios?

3. Decisiones tecnológicas: ¿Qué recursos tecnológicos tenemos disponibles que nos permitan enriquecer y mejorar estas actividades? Estos recursos, ¿realmente aportan al proceso de aprendizaje que está realizando el alumno? ¿Le permiten aprender más y mejor?

Este orden no es casual, viene a reforzar la idea de que debemos integrar la tecnología en nuestra propuesta de enseñanza en función de lo curricular y lo pedagógico , y no al revés.

Tomadas estas decisiones tenemos una idea general de qué, cómo y con qué tecnologías vamos a enseñar. A partir esta idea, Adell propone construir la planificación como quién construye una casa con Legos. La metáfora piensa cada actividad como si fuera uno de estos ladrillitos plásticos que van colocándose uno sobre el otro o uno junto a otro según el plan. Cada ladrillo tiene una forma y un calce particular, no pueden ubicarse aleatoriamente; lo mismo sucede con las actividades, la secuencia en que proponemos las mismas es tan importante como la actividad en sí y su sumatoria debería dar lugar a la realización de tareas complejas.

Encontrar los recursos adecuados no es sencillo y lleva mucho tiempo de búsqueda y selección, además vamos a necesitar apropiarnos de un buen número de aplicaciones potentes para motivar a nuestros alumnos y enriquecer nuestras propuestas de enseñanza. Existen algunas taxonomías que pueden ayudar pero, como dijimos antes, no hay recetas ni experiencias directamente transferibles de una clase a otra.

Todo viaje comienza dando un primer paso. Animarse, buscar, jugar y, sobre todo, compartir, son algunas de las claves para empezar.

Bibliografìa:

Litwin, Edith (2008), El oficio de enseñar: condiciones y contextos, Buenos Aires, Paidós.
Magadán, Cecilia (2012), “Clase 4: El desafío de integrar actividades, proyectos y tareas con TIC”, Enseñar y aprender con TIC, Especialización docente de nivel superior en educación y TIC, Buenos Aires, Ministerio de Educación de la Nación.
Marqués, P. (2000): “Los medios didácticos”. Disponible en: https://graphos.wikispaces.com/file/view/LOS+MEDIOS+DID%C3%81CTICOS+Y+LOS+RECURSOS+EDUCATIVOS.pdf
Shulman, L. S. (2005): “Conocimiento y enseñanza: fundamentos de una nueva reforma”, en Profesorado. Revista de currículum y formación del profesorado, 9, 2. Revisión técnica de Antonio Bolívar, siguiendo la traducción realizada por Alberto Ide para la revista Estudios Públicos (número 83, 2001, pp. 163-196). Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=201014897009
http://tpack.org/

Publicado el:

viernes 17 de febrero de 2017

Autor:

  • Claudia Azcárate

Nivel:

  • Primario
  • Secundario

Temática

  • TIC

Tipo de Recurso

  • Curación de Contenidos